Beneficios de los aceites en cosmética

¿Le da miedo utilizar aceite facial? ¿Cree que le saldrán más granos o acné? Una duda totalmente comprensible. Por eso es justo y necesario que resolvamos tus dudas y todas las que surgen cuando hablamos de aceites faciales.

Tenemos buenas noticias porque, a pesar de que cada vez está más de moda, en nuestro país todavía existen muchos prejuicios sobre la hidratación con aceites faciales. La realidad es que sólo afecta a tu piel grasa o mixta si no utilizas un aceite adecuado. Así que tu mejor aliado será un aceite natural, que sea perfectamente absorbido por la piel, como los aceites KYNGDY.

La piel está compuesta en su mayor parte por un 64% de agua, por lo que es esencial mantenerla hidratada para que esté sana, elástica y firme. La pérdida de humedad que se produce en la piel deshidratada puede deberse a factores externos (cambios bruscos de temperatura, alergias, dieta poco saludable, falta de sueño, estrés) o internos (por ejemplo, procesos hormonales).

Para evitar la deshidratación de la piel en nuestro cuidado diario, debemos elegir productos que incluyan tanto el agua como la hidratación que la piel necesita, junto con otros ingredientes que puedan penetrar en las capas más profundas, para nutrirlas y fortalecerlas. Los aceites son la mejor alternativa.

La aparición de nuevas categorías de productos siempre genera muchas dudas sobre su uso. Por eso es importante aclarar que, si se opta por un aceite facial, hay que utilizarlo antes de la crema hidratante (eliminando el paso del suero). Otra alternativa es utilizar el suero durante el día y el aceite por la noche.

Uno de los grandes beneficios de un aceite facial es que previene la deshidratación y ayuda a la penetración de los cosméticos aplicados después. Sus principios activos penetran profundamente en la piel sin irritarla y, sorpresa: ¡Aportan más luminosidad durante todo el día!

Estos son los principales beneficios de los aceites en la piel, ¡toma nota!

• Su textura ligera les permite penetrar en las capas más profundas de la piel, a diferencia de otras opciones que se quedan a un nivel más superficial (como las cremas, por ejemplo).
• Penetran en la piel, la limpian, la hidratan, ayudan a mantenerla y evitan la pérdida de agua
• No interfieren con la barrera natural, producida por la piel, que nos protege de los factores externos
• Algunos aceites actúan como antibióticos y antisépticos naturales, combatiendo las bacterias las infecciones de la piel.
• Contribuyen a la regeneración celular y a la cicatrización de los tejidos.
• Son tonificantes y aportan elasticidad y suavidad.
• También los hay con funciones calmantes y antiinflamatorias.
• Aportan brillo, luminosidad y un aspecto saludable a la piel.
• Hidratan y nutren en profundidad.